Los años pasan y tus hijos van abandonando los juguetes con los que pasaron su infancia y tanto disfrutaste viéndolos reír, crecer y aprender. Ya no se pasan el día jugando con muñecos, haciendo puzles o construyendo bloques. Tras este momento,
te quedan dos opciones, deshacerte de ellos o almacenar los juguetes para guardarlos de recuerdo o plantear darles una segunda vida.
Quizás, aunque los juguetes ya no se utilicen y no puedas justificar el espacio que ocupan en tu hogar, no estés preparada para dejarlos ir y renunciar a los recuerdos que te traen de la infancia de tus hijos. Además, existe la posibilidad de que estos juguetes puedan ser luego disfrutados por otros niños, como los hermanos menores de sus primeros dueños, por ejemplo.
Desde habilitar una habitación para los juguetes hasta el alquiler de un trastero, entendemos la gravedad de este momento y te queremos brindar opciones que puedas considerar.
¿Dónde puedo guardar los juguetes viejos de mis hijos?
Existen diferentes opciones de donde puedes
almacenar los juguetes, las cuáles pueden ser más o menos viables dependiendo de tu situación. Por ejemplo, si los tienes a tu disposición, puedes dedicarles
gabinetes o estantes a los juguetes que tus hijos solían usar.
Si tienes una habitación disponible, puedes convertirlo en un
playroom, o cuarto de juguetes, dónde otros niños podrán jugar y dónde podrás entrar y perderte en la nostalgia de la infancia de tus hijos. También puedes organizar los juguetes en cajones y mantenerlos en algún armario o lugar dónde no estorben.
Sin embargo, cuando ninguna de estas alternativas es viable, la mejor opción es
almacenar los juguetes en un trastero. De esta manera, puedes estar seguro de que los juguetes, esas reliquias de una niñez pasada, no han sido desechados y a la vez puedes disfrutar del espacio libre que crearás en tu hogar. Además, dejas abierta la posibilidad de que otros niños puedan en su momento divertirse también con los juguetes, como tus hijos una vez lo hicieron.
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Consejos para el almacenaje de juguetes
Lo primero es asegurarte de tener a mano todas las herramientas que vas a utilizar para organizar los juguetes y prepararlos para su
almacenamiento. Esto incluye, por supuesto, las cajas o los contenedores que vayas a usar, así como herramientas adicionales como cinta de embalaje o tijeras. Si la colección incluye juguetes frágiles o delicados, utiliza algún material de almacenamiento, como el papel de burbujas o papel de periódico, para protegerlos.
Asegúrate de limpiar e higienizar bien los juguetes antes de almacenarlos, ya que pueden tener bacterias o gérmenes que puedan propagarse mientras estén guardados.
También ten en cuenta el orden en el que organices los diferentes tipos de juguetes en las cajas o contenedores. Puedes usar los juguetes más suaves, como los peluches, para proteger los juguetes más frágiles. También se recomienda empacar los juguetes más pesados en la parte de debajo de las cajas o contenedores.
Guarda los juguetes para que tengan otra vida
Ya que conoces las diferentes opciones que tienes para
almacenar los juguetes que tus hijos ya no usen y tienes consejos para hacerlo de la manera óptima, puedes estar tranquilo sabiendo que los juguetes de tus hijos no se perderán y estarán disponibles para tener una segunda vida.
Será muy gratificante ver como otros niños juegan y se divierten como tus hijos una vez lo hicieron, todo gracias a ti y a los pasos que tomaste para
guardar los juguetes. Estos niños pueden ser los hermanos menores o incluso tus futuros nietos, añadiéndole a su significado emocional.
Si eliges guardarlos en un trastero, recuerda que hay diferentes
factores para tener en cuenta para alquilar un trastero.
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